Las expectativas por el film "Frankenstein" a cargo del cineasta mexicano Guillermo Del Toro fueron grandes, Del Toro nos ha entregado una producción tan cuidadosamente detallista que está a la altura de lo que hemos conocido de su cinematografía.
Con un elenco, no solo actoral, sino en todo aspecto, iluminación, efectos especiales, maquillaje, vestuario, de primera, hemos podido disfrutar del lanzamiento en la N Roja de esta cinta cuya duración de 2 horas 32 minutos es imperdible.
El afamado director ganador del Oscar nos otorgó su versión de el relato de Mary Shelley y congruente con sus propios monstruos nos presenta a uno con esa capacidad de despertar empatía, ya lo vimos con "La Forma Del Agua", como no amar a esos monstruos capaces de mostrar sentimientos, de hecho, los amantes del terror critican el hecho de que este Frankestein no sea más aterrador, pero para fortuna de los que no somos tan fans del terror, nos lo presenta, aceptable, diluido, logrando llegar a ambos públicos.
Dentro de la historia de su bestialidad hubo tiempo de descubrir su soledad, sus ansias de afecto, quien no se derrite en la escena en la que está junto a su "amigo" y le coloca su mano en su cabeza para sentir una caricia de padre tal y como lo vio acariciar a su nieta. En esta etapa el quiso formar parte de un núcleo familiar a pesar de no entender cierta agresividad de una especie a otra.
El estilo de Guillermo Del Toro, un estilo atrevido, simbólico, de contrastes, con dominio de los efectos de luz con iluminación lateral, contraluz, atmósferas surrealistas que brincan del cuento de hadas al estilo gótico y viceversa, los detalles visuales con esas criaturas que pueden espantar a cualquiera, pero que a la vez las hace sentir vivas y conectadas de alguna manera con la humanidad.
Guillermo es capaz de crear escenarios nuevos, con una mezcla de fantasía oscura, que es capaz de presentarnos una película a color a momentos de imagenes casi sepia que bien podrían llegar a desconcertarnos.
El elenco, increíble, Oscar Isaac como el creador del monstruo, un personaje aturdido por sus propias ideas que casi rayaba en la locura al grado de lograr su máxima creación, su monstruo, representado magistralmente, interpretado por Jacob Elordi a quien vimos en la trilogía del "Stand de los Besos", con un cambio radical de personaje que a sus seguidores los ha convencido del nivel actoral que tiene, y Mia Goth, la dulce Elizabeth que fue capaz de comprender y despertar empatía por la criatura, no vio su monstruosidad, vio su alma.
Es un film sin pretensiones, pero que al estilo Del Toro, escrupulosamente cuidadoso, sabemos que él se involucra en cada detalle, el maquillaje de Mike Hill, está bien trabajado, debo decir que tan solo en una escena percibí la prótesis en la mejilla de Jacob Elordi, pero trabajaron en un ente lo suficientemente creíble entre lo humano y lo antinatural.
El Frankenstein de Guillermo Del Toro, no solo busca representar un clásico de terror, sino que nos da la oportunidad de conocer el enfoque romántico, personal, afectivo de los personajes en un ambiente de tragedia con chispazos de ternura que son capaces de coexistir en esta producción.
Gracias a Del Toro y a todo su gran equipo por darnos esta producción, por ser fieles y concisos a lo que querían lograr y transmitir. Los errores humanos se pagan y así lo vivió el propio médico Frankenstein, pero a la vez existe la redención y eso nos transmite esta historia.
Gracias por tu lectura, nos leemos a la próxima y recuerda que las estrellas las otorga el público.
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